Padres adoptivos de una participante de Noruega

Cuando SEMVO nos contactó para ser padres adoptivos de la estudiante, estábamos emocionados por vivir una nueva experiencia, con una nueva hija adoptiva y lograr conocer nuevas costumbres e inculcarle a ella las tradiciones de la familia.

Cuando mi esposo a fue a recogerla con mis tres hijos, fue una experiencia inolvidable para todos. Ellos se han llevado muy bien, han compartido juegos de futbol, de campo, viajes a las piscinas, a la playa donde han disfrutado a lo máximo como un nuevo miembro a la familia, ya que ella se adaptó con facilidad a la familia.

Al inicio del colegio fue difícil para la estudiante pues no dominaba ni entendía el idioma español, donde todos en casa desde los gemelos hasta la abuela y los amigos ayudamos para que comprendiera y se le facilitara la comprensión del idioma, hasta la ayuda de un docente se le tuvo que facilitar para que lograra entender y hablar el idioma. Fue una experiencia muy linda cuando lo logro comprender.

Mis hijos pequeños se acoplaron muy bien con ella e incluso disfrutaban más que con ella que con la propia hermana, donde han aprendido a jugar escondido hasta los juegos más sofisticados, les gusta ir al cine con ella.

Si realmente hubo diferencias culturales, la estudiante se supo adaptar muy bien a las reglas y costumbres familiares, donde pedía permiso incluso hasta para ir al supermercado.

SEMVO siempre nos apoyó en todo momento cuando hubo diferencias para lograr estar como una familia unida.

Para la familia es un agrada tener a la participante como un miembro más de la familia, tanta así que se le enseño a hacer tamales navideños, el pasito familiar, arroz con pollo, gallo pinto, a tomar café que incluso al principio dijo que no le gustaba porque sabía feo ahora le encanta, nos ayudado a pintar la casa y le gusta andar en el campo, ella ama a nuestro país dice que volverá pronto y si vuelve la recibiremos con los brazos abiertos.

Para la familia va hacer difícil despedirse de ella porque se le va extrañar mucho ya que para nosotros es una hija más, pero estamos muy contentos de haber compartido con ella esta experiencia inolvidable para nosotros, porque realmente ha sido un intercambio de culturas.

Familia Martinez