Familia adoptiva de una participante de NORUEGA
Bueno primeramente cuando vi la publicación de SEMVO para adoptar por 10 meses a un estudiante de intercambio; pensé que sería muy bueno para mis hijas ya que ha ellas les gusta tener muchas amistades y aprender un nuevos idiomas.
Cuando les comente a mis hijas, 20 y 22 años, las dos estuvieron de acuerdo en agrandar la familia por 10 meses. Entonces Hazel comenzó ha llenar los documentos para inscribirnos en el programa de SEMVO con muchas alegría y emoción por tener una hermana más.
Nos emocionaba el pensar en conocer una cultura nueva y un idioma más.
Cuando llegó el día de ir a recoger a la estudiante nos emocionamos muchísimo ese día, le hicimos una bienvenida a Hulda con comida típica, para que ella se fuera acostumbrando y comió bastante dijo que era muy buena la comida de Costa Rica.
El primer mes sabíamos que le iba hacer difícil a la estudiante para aprender el idioma, pero con ayuda de nosotros y de nuestros amigos, para ella fue más fácil de lo que pensábamos y también que ayudó el hecho de que ella quería aprender rápido el idioma. Siempre preguntaba que era esto y aquello y ella llevaba una libreta donde apuntaba todo para en la noche repasar las palabras nuevas que en ese día aprendía.
Nuestra hija adoptiva es una niña muy buena, amable y super sociable. Le gusta hablar con las personas, no es nada tímida eso es lo bueno de ella, y también super obediente. No tuve problemas con ella para nada.
Siempre preguntaba “puedo ir a tomar un café frio, con mis compañeras del colegio y regreso un una hora y media”-. Nunca tuve que regañarla por llegar tarde ni por malcriada.
Mis hijas adoran a la estudiante, sobretodo mi hija de 20 años, que con ella compartió mucho.
Con mi hija de 22 años y conmigo le decíamos a ella que fuéramos a tal lado y ella siempre con su carita de felicidad, si claro vamos. Esta niña se supo adaptar muy rápido a nuestras costumbres y estilo de vida callejero (bueno cuando se podía) y cuando era clases eran clases.
La estudiante va a la iglesia no se pierde un día sin ir le gusta ir y eso me alegra tanto que vaya con nosotros, nunca ha puesto un pero, siempre va. Bueno y podemos decir le fascina el taekwondo entrena 3 veces a la semana, siempre emocionada por ir. El 8 de marzo tuvo un campeonato donde ganó una medalla quedo en tercer lugar. Todas nos sentimos super orgullosas de ella por el esfuerzo que puso y también hay que agradecerle a la academia que la recibió con un calor familiar a donde siempre le dieron apoyo a para seguir adelante con los entrenamientos.
Sinceramente NO nos arrepentimos de tener a esta hija adoptiva con nosotros. Ha sido un placer y honor tenerla como parte de nuestra familia. La amamos porque vino a poder más felicidad a nuestras vidas y ese toque noruego.
No nos despedimos con un adiós sino con una hasta luego, sé que la veremos muy pronto en nuestra casa otra vez.
Gracias SEMVO por permitirnos tener a esta hija adoptiva como parte de nuestra familia.
